Las velas como alas flexibles.

Una semana más dedicamos la entrada del ‘Blog náutico de PST Puerto Sotogrande’ a las velas de una embarcación. Para ello, es útil reconocer como es una vela típica ya que las velas están normalmente construidas de un material flexible para permitir que la vela trabaje con el viento en ambas caras para permitir las viradas.

Esto supone una restricción importante ya que elimina o impide la fabricación de muchos diseños que no serían capaces de mantenerse en el viento, lo que nos lleva al diseño tradicional de las velas como una forma plana triangular, en el que el material de la parte inferior de la vela tiene que estar suspendido del material que se encuentra por encima, el cual, eventualmente, se reduce a un punto en la parte superior del mástil.

Así, el problema que se presenta en la navegación es cómo fabricar y manejar una vela flexible para producir una componente de fuerza sustancial capaz de mover el barco. Tanto la velería como el arte de la náutica, son importantes para conseguir el objetivo de navegar de manera segura.

Es importante también saber cómo se reduce la restricción de que las velas se auto soporten, como, por ejemplo, usando sables completos y materiales más fuertes, ya que las velas pueden evolucionar para ser más eficientes. Su aspecto pasa a ser entonces más como un ala y menos como una vela.

Analizar la forma de trabajar de una vela como un ala es útil, no solo para las velas modernas que parecen alas, sino también para las velas tradicionales que mientras que parecen velas, operan realmente como si fuesen alas. Sin duda, lo importante de estos consejos es ponerlos en prácticas cuando afrontemos la próxima travesía por el mar.